Martires de Bomberos de Rancagua
Homenaje que se rinde a los Voluntarios que con su vida han defendido los ideales que el Cuerpo de Bomberos de Rancagua.
Hombres de valor y fe que dieron su vida por un solo fin… «Servir»; hombres que hoy son el cielo estrellado que ilumina el andar de los Bomberos Voluntarios siempre serán recordados por las nuevas generaciones como aquellos que murieron cumpliendo con su deber…
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Ricardo Ruizdiaz Nieva
El día 26 de agosto del año 1963, el preludio del drama se inició cuando a las 15:10 horas comenzó a sonar la sirena llamando a los bomberos para que acudieran al Garaje Berrios, en la calle Diego Portales, donde se había inflamado una palangana.En breves minutos se encontraban en el sitio de la tragedia.
Efectivamente, el carro bomba Mack de la Primera Compañía, al dirigirse por la calle Gamero de oriente a poniente, chocó al llegar a la calle San Martín (en esa época de doble vía) con un inmenso camión que transportaba petróleo a la Braden Cooper Company, actualmente División El Teniente, de propiedad del Hogar San José.
Varios voluntarios habían saltado al pavimento y de allí habían sido recogidos: Ricardo Ruidíaz Nievas, Luis García Martínez y Luis Bahamondes Córdova. El carro de transporte de voluntarios los llevó al hospital.La muerte de Ricardo Ruidíaz Nievas constituyó un duro golpe para la Primera Compañía, que tenía en él a uno de sus más preclaros voluntarios.
Adrian Campos Mendoza
(1886 - 1914)
Adrián Campos Mendoza, nacido en Rancagua en 1886, mostró desde joven una fuerte vocación por ayudar a los demás. Perteneció a la Primera Compañía, para luego unirse a la Tercera Compañía de Bomberos de Rancagua, que en ese entonces llevaba el nombre de "Salvadores y Guardias de Propiedades” en donde tambien fue uno de sus fundadores y uno de sus primeros secretarios.
El 29 de octubre de 1911, un gran incendio amenazó al pueblo de Los Lirios, a unos 12 kilómetros al sur del río Cachapoal. Ante la emergencia, la Primera y Tercera Compañía de Bomberos se dirigieron al lugar en carros de ferrocarril. Al llegar a la estación en plena oscuridad, un accidente se produjo cuando el volante del carro en el que viajaban los bomberos se cortó. Adrián Campos y Manuel Araneda, ambos de la Tercera Compañía, resultaron gravemente heridos mientras transportaban una escalera. Simultáneamente, el incendio provocó la explosión de un almacén repleto de bidones de parafina y explosivos. Adrián fue el más afectado, quedando atrapado bajo las ruedas del convoy. Su cabeza, que había resbalado fuera del casco, quedó comprimida contra el riel, y sufrió graves contusiones en todo su cuerpo.
Trasladado de urgencia a Rancagua, siendo atendido por el médico Eduardo de Geyter, quien junto a su equipo lograron salvar su vida, pero las secuelas del accidente lo acompañarían por siempre. A pesar de su delicado estado de salud, Adrián continuó vinculado a la compañía de bomberos, formando y educando a los nuevos cadetes. Sin embargo, su salud se fue deteriorando progresivamente debido a las heridas internas que sufrió en aquel llamado en los Lirios. En 1914, tras complicaciones de una operación, falleció en Santiago el 25 de octubre a los 28 años.
Adrián Campos fue velado en la Tercera Compañía de Bomberos de Rancagua y su funeral recorrió las principales calles de la ciudad. En su honor, hoy una calle de la población Manzo de Velasco lleva su nombre, siendo recordando su legado como uno de los primeros mártires de la tercera de Rancagua
Domingo Villalobos Espina
El día 03 de febrero del año 1943, a las 21:00 horas, se produjo una inusitada alarma de inundación en la calle Larga, actualmente Avenida Miguel Ramírez, que une a la localidad de Machalí, concurriendo la Segunda y Tercera Compañía.Era un día de fuerte lluvia y el carro bomba de la Segunda Compañía se dirigía por la calle Independencia de poniente a oriente, mientras que el carro porta-escalas de la Tercera Compañía lo hacía por la calle Bueras de norte a sur. Ambas máquinas llegaron al mismo tiempo a la esquina de las calles Bueras con Independencia, produciéndose el choque entre ambos vehículos, resultando varios voluntarios heridos y falleciendo el Teniente Primero de la Tercera Compañía, don Domingo Villalobos Espina, inscribiendo así su nombre en el Libro de los Martires del Cuerpo de Bomberos de Rancagua.
Juan Luis Salgado Salgado
En el mismo choque en que falleció el voluntario Domingo Villalobos Espina, el día 03 de febrero del año 1945, resultó gravemente herido el voluntario y Teniente Segundo de la Tercera Compañía, don Juan Luis Salgado Salgado. Este sufrió serias lesiones cerebrales que hacían crisis frecuentemente y que le produjeron la muerte varios años después, ignorando hasta el día de hoy lugar, causas, y otros detalles.
La Tercera Compañía de Bomberos de Rancagua, en el mes de mayo del año 1974, en sesión ordinaria de la unidad, solicitó al Honorable Directorio General que se reconociera como mártir de la institución al voluntario Salgado Salgado. El Honorable Directorio General, en sesión ordinaria del mes de noviembre del año 1974 y después de treinta y nueve años de haber ocurrido el choque de los carros de la Segunda y Tercera Compañía, acordó nombrarlo mártir de la institución.
David Eduardo Valdivia Contreras
El día 07 de junio del año 1957, la Tercera Compañía realizaba un ejercicio bomberil para incentivar al público a favor de la colecta anual de la institución, en la Plaza de los Héroes, frente al Liceo de Niñas de nuestra ciudad.El joven Valdivia Contreras fue aspirante de la compañía en su infancia. El voluntario mencionado, durante el ejercicio, subió a la techumbre del edificio educacional para lanzarse por la deslizadora, y al entrar mal en este elemento bomberil, cayó desde una altura aproximada de 7,2 metros. Falleció en la noche a consecuencia de las graves lesiones sufridas.
Edmundo Calvo Gómez
Fue fundador de la Segunda Compañía de Bomberos de Rancagua. El día 09 de marzo del año 1948, durante los trabajos de construcción del edificio del Cuartel General, que dirigió personalmente, sufrió un ataque cardíaco que le produjo la muerte, debido al exceso de esfuerzo físico desplegado en la obra.Ocupó cargos en la oficialidad, en especial como Director, Comandante y Tesorero General. Su obra destacada es la construcción del Cuartel General, desde que se iniciaron los trabajos hasta el momento mismo de su fallecimiento.De forma unánime, a solicitud del Directorio General de la época, se aceptó la moción de la Tercera Compañía. En consecuencia, el Cuartel General llevará el nombre de "EDMUNDO CALVO GÓMEZ".
